Hace 30 años era la ciudad más contaminada de España, junto con Avilés, y hoy es una caja de sorpresas para el visitante. Tanto para el que busca sol y playa, como para el que busca historia y cultura.
Tenía muchas ganas de ir, pero como es de esas ciudades que tienes ahí al lado, van pasando los años, y hasta hoy. Pero desde luego que ha sido el hallazgo del teatro romano para 7000 espectadores, sepultado por todo un barrio, lo que ha devuelto el esplendor a esta ciudad portuaria.
Recomiendo empezar la visita en la oficina de turismo que hay frente a la muralla marítima y contratar alguna de las visitas guiadas. Imprescindible visitar primero el museo del teatro romano, edificado por el arquitecto Rafael Moneo, y que te va introduciendo en la historia de la ciudad (por aquí pasaron bizantinos, musulmanes y cristianos) hasta desembocar directamente dentro del teatro romano.
Cuesta trabajo pensar que durante tantos siglos haya estado oculto bajo tierra. Lo descubrieron por casualidad en 1988 y se abrió al público en el 2008.
También muy interesante ir a ver el submarino de Isaac Peral y conocer toda su historia. Imprescindible la visita con guia, y desde aquí mi reivindicación de esta profesión, que te puede hacer cambiar una visita de aburrida a sorprendente. Sin estos profesionales te pierdes la historia del soldado San Pedro que consta en nómina en el arsenal militar, y es arrestrado todos los años el martes santo por llegar tarde al cuartel. O la historia, "gemela" a la de la Casa Carbonell de Alicante, que tiene el edificio que está junto al Casino.
Para un próxima visita nos hemos dejado el ARQUA, el museo de arqueología subaquatica y la visita guiada al barrio del foro romano.
La ciudad es muy bulliciosa. Hay turistas que vienen de los cruceros que atracan en el puerto, y se ve mucha vida. No hay que irse sin probar el caldero cartagenero con pescado de roca. Y para tapear ir a la calle Jara y entrar a la bodega más antigua de la ciudad, La uva jumillana.
Pedir un vermut y unas bravas o unas berenjenas. Tienen en verano vermut granizado, que es muy parecido a nuestra "mentireta" alcoiana. Todo muy barato y muy auténtico.