Una de cine español para llevar la contraria: Todas las mujeres, lo nuevo de Mariano Barroso

A este chico habría que clonarlo por el bien del cine en general. Hablo del protagonista de Todas las mujeres, el actor catalán, Eduard Fernández ( En la ciudad, El método, Biutiful, Pa Negre, Una pistola en cada mano ) , un crack de la interpretación que sigo con especial devoción (y que me perdone Ricardo Darín). 

Siempre consigue meterse en la piel del personaje de tal manera que jamás, ni por asomo, veo a Eduard, siempre es Fulano o Mengano. Tiene una capacidad de absorción bárbara. No es que sea una belleza, ni siquiera es alto o macizorro, es un tío normal con una seducción brutal. Y en Todas las mujeres saca una vena sarcástica y desvergonzada que hace del personaje un bombón, aunque en realidad no sea pájaro de fiar. 

Eduard ya trabajó con Mariano Barroso en Los lobos de Washigton y vuelve ahora con ésta comedia. Una película que viene a ser un largo diálogo entre un hombre y una mujer, aunque sean seis los personajes femeninos. 

Se trata de una "comedia negra rural" si se me permite este sub-género. Una historia que cuenta los problemas a los que se enfrenta un veterinario inseminador de vacas, que decide robar ganado a su suegro y venderlo en Portugal. Su mujer, su madre, su becaria, su abogada, su cuñada y su psiquiatra es el coro femenino que le da la réplica en unos diálogos divertidos e ingeniosos. 

Recomendable aunque el final no va a gustar a muchos. Por cierto, rodada con cuatro duros, una casa, un paisaje y poco más.