Violència afectiva y catástrofe emocional en esta película indie que nos llega a nuestras carteleras con más de dos años de retraso. Blue Valentine es un duelo interpretativo entre el camaleónico Ryan Gosling (Los idus de Marzo) y Michelle Williams (Brokeback Mountain).
Blue Valentine es el segundo largometraje de ficción del documentalista y realizador televisivo Derek Clanfrance, de quien en marzo se estrenará The place beyond the pines, película policíaca donde repite Ryan Gosling.
Jugando con el tiempo el director va saltando arriba y abajo seis años de convivencia entre la pareja protagonista, pasando de la felicidad al hastío, de la pasión a la incomunicación, y todo con el peso del recuerdo del maltrato paterno hacia la madre.
Me ha gustado como mostrando a intervalos el principio y el final de esos años se va reconstruyendo la devastación de esa convivencia, , como se pasa de la entrega pasional a la duda sistématica, del amor al desprecio. Y lo hace haciendo honor a esa tristeza del título, a ese blue que también impregna de colores azulados y grises todo el metraje. Pero lo mejor de todo, y lo que de verdad destaca en esta cinta, es el duelo interpretativo de los protagonistas. Cada beso no dado, cada reproche, cada mirada envenedada, duele al espectador.
Abstenerse los inmersos en procesos de separación, dudas metafísicas, luto por amores, y otros estados emocionales frágiles.
Blue Valentine es el segundo largometraje de ficción del documentalista y realizador televisivo Derek Clanfrance, de quien en marzo se estrenará The place beyond the pines, película policíaca donde repite Ryan Gosling.
Jugando con el tiempo el director va saltando arriba y abajo seis años de convivencia entre la pareja protagonista, pasando de la felicidad al hastío, de la pasión a la incomunicación, y todo con el peso del recuerdo del maltrato paterno hacia la madre.
Me ha gustado como mostrando a intervalos el principio y el final de esos años se va reconstruyendo la devastación de esa convivencia, , como se pasa de la entrega pasional a la duda sistématica, del amor al desprecio. Y lo hace haciendo honor a esa tristeza del título, a ese blue que también impregna de colores azulados y grises todo el metraje. Pero lo mejor de todo, y lo que de verdad destaca en esta cinta, es el duelo interpretativo de los protagonistas. Cada beso no dado, cada reproche, cada mirada envenedada, duele al espectador.
Abstenerse los inmersos en procesos de separación, dudas metafísicas, luto por amores, y otros estados emocionales frágiles.
2 comentarios :
Sister, con tu recomendación de abstenerse tinc prou...R
Quien avisa no es traidor!
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