24 septiembre 2009

Gordos, todos lo somos.



Para mi el gancho de la película, aquello que me ha hecho elegirla entre otros filmes en cartelera, es la dirección. Es la segunda película de Daniel Sánchez Arévalo, y como me encantó su opera prima Azuloscurocasinegro, allà que he ido.

Gordos
es una comedia dramàtica coral, con cinco historias que giran en torno a la obesidad. Hay dos nexos comunes, por un lado el grupo de terapia al que acuden cinco de los protagonistas, y por otro, el spot publicitario que anuncia un método para adelgazar y que protagoniza uno de ellos. Este spot sirve para dividir la historia en capítulos,cada uno con una regla del revolucionario tratamiento predicado por el personaje de De la Torre.



La película narra el enfrentamiento de cada uno ante sus miedos,sus sueños y sus fantasmas. Gordos viene a decirnos que pesa más el peso de nuestras contradicciones que el peso de nuestros michelines, que aquello que nos impiden ser felices no se mide en una báscula. El guion es bueno, quitando algún exceso dramático, y un final que deberia haberse aligerado cargándolo con más sentido del humor, que si vemos en el resto de la película.

Visualmente Sánchez Arévalo da un paso más y nos regala secuencias muy curradas como el montaje en paralelo del parto y la escena de sexo , alternando los rostros de Verónica Sánchez y Roberto Enríquez como si ambos compartieran cama.

Y algo que no me ha gustado son dos interpretaciones: la de Antonio de la Torre (una pena porque engordó 33 kilos para su papel), que da vida a un homosexual poco creíble, y la de Raúl Arévalo, que tampoco me lo creo. El resto del reparto, genial.

Segunda película, y aunque me gustó más la primera, Gordos es todo un voto de confianza para su director.

1 comentario :

dapazzi dijo...

y le dejaba un bigote mas bonito¡