La Finca, Elx

Evidentemente un sitio como el restaurante La Finca de Elche /Elx invita desde el principio a disfrutar del momento. Nada más entrar la decoración exquisita. Moderna , cálida y acogedora. El servicio impecable y en la vajilla se dan la mano el buen gusto y el diseño en una sucesión de platos, recipientes y cubiertos varios, desde el cartón, hasta la piedra, pasando por la palma. Todo a la altura de un restaurante de la categoría del de Susi Díaz.



Como la ocasión y la compañía lo merecen elegimos el Menú Degustación de Invierno.
Para empezar unos aperitivos donde la imaginación participa tanto como la cocina. Unas casi transparentes làminas de pan con sobrasada y tomate. Esto tengo que probar a hacerlo yo.
A la vez nos presentan una cata de aceite y sales. Una sal griega y otra elaborada por la chef ilicitana, que no voy a decir que lleva para hacerlo yo también en casa y quedar como una reina. También nos traen unos chips hechos de calabacín, o tal vez yuca, y flores,creo que son pensamientos. Adivinar y dejar sorprenderte por nuevas texturas forma parte del encanto de esta cena.

A continuación más aperitivos, y seguimos jugando. Nos traen una cajita con un lazo. Un regalo con tres sorpresas. Tres bocados, uno de bacalao, otro parece arenque y el tercero no lo identifico. Magníficos los tres.

Y empezamos con el primer plato. Mejillón en puré de guisantes. Muy fino. A continuación ostra en espuma de cítricos. Puro mar. Delicioso con eso punto refrescante a naranja y limón. Podia cenar sólo esto.

Ahora nos presentan un helado de espárragos blancos. Interesante.
Seguimos con un arroz meloso con raya y patata. El pescado en su punto. Llegan las gambitas al ajillo sobre macadamia y parmesano. Sublime, el “suquet” espeso que aparece debajo de las dos gambas.

Chicharro en salsa de coliflor. Rectifico, a partir de ahora, si que me gusta la coliflor , siempre que sea así.
Luego llega la pechuga de pichón de Bress sobre salsa y crujiente de dátil ( un guiño a Elche) acompañado de bombón de queso e hígado de pichón. Para que explicarlo…..
Continuamos con setas salteadas sobre miga de jamón y crujiente de Ibéricos. Para mi lo más flojo, pero claro es que el listón está por las nubes.

Cambiamos de tercio.
Llega un refrescante de piña colada. Delicioso. Suave y exótico.
Mini tabla de quesos maridados. Cinco bocaditos para pecar.
Y por último una selección de chocolates. No puede haber mejor final.
El vino uno de la tierra, un cabernet sauvignosn,Montcabrer de la bodega Vins del Comtat.

En resumen una cena excelente, con una compañia excelente, que espero no tardemos tanto en repetir.