Hacía mucho tiempo que no veia comedia en la gran pantalla y el domingo el cuerpo me pedia reir, como se suele decir, a mandíbula batiente, así que entré a ver Un funeral de muerte. El hecho de que el director sea Frank OZ (La pequeña tienda de los horrores,¿Qué pasa con Bob? o In & out) me daba confianza y pagué los seis euros de la entrada.
El título te adelanta la trama ( que para eso sirven los títulos). Se trata de un funeral del cabeza de familia de una familia inglesa. La aparición del hijo prodigo, el misterio de una persona que nadie conoce y que trae consigo un secreto, la reunión de antiguos amigos, el choque de las estrictas normas de conducta britànicas con la vida real de las nuevas generciones,....todo eso se convierte en un entramado bien llevado con golpes divertidos y incluso con el savoir - faire de convertit una escena con excremento incluido en humor blanco.
Un funeral de muerte està en la línea de la comedia ligera inglesa ( Cuatro bodas y un funeral, Bridget Jones)y como en estas películas nos encontramos con un reparto exquisito. Actuaciones redondas de la escuela de teatro británica, una de las mejores. Resumiendo, una buena película, desenfadada y sencilla, para pasar un buen rato.
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