04 junio 2009

De paseo por la Suecia de Lisbeth

Suecia, hasta hace poco era para mi ese pequeño país nórdico, frio (9 grados de media) y caro; cuna de Abba, Ingrid Bergman y Greta Garbo. Pero llegó la trilogia de Millenium y estoy a punto de coger un avión a Estocolmo. Convertida en destino de moda por obra de Stieg Larsson, me imagino que ya circulan por sus calles turistas - lectores tras las huellas de sus personajes más famosos, el periodista Mikael Blomkvist y la joven hacker Lisbeth Salander.

La obra de Stieg Larsson transcurre en distintos puntos de Suecia, pero tiene su epicentro en Estocolmo, lugar donde viven y trabajan sus personajes. Y de las catorce islas que forman la capital sueca, es en Södermalm, la más bohemia de todas, donde discurre gran parte de la ya conocida como «ruta Millennium». Vamos a dar un paseo por allí.

Götgatan

En esta vía semipeatonal y circuito habitual de aquellos que salen de compras (H&M, Ordning Och Reda, Granit, Designtorget, Olsson Och Dåm...) o quieren tomar una cerveza tranquila en compañía de amigos, situó Larsson las oficinas de la revista Millenium. Exactamente en el número 19, encima de las oficinas de Greenpeace.

Mosebacke

Las habilidades al teclado de Lisbeth Salander le permiten cambiar de domicilio y comprar, muy cerca de Götgatan, un bonito apartamento de 21 habitaciones en Fiskargatan, 9. A Fiskargatan se llega tras subir unas pequeñas escaleras y atravesar Mosebacke, una de las plazas con más encanto de Södermalm. Sin apenas tráfico, es un rincón aislado y tranquilo que en verano se convierte en agradable zona de paseo. Conserva una de las pocas cabinas de teléfono que aún quedan en la ciudad, aunque lo más significativo de Mosebacke es el Södra Teatern del año 1859, y el Katarinahissen, un ascensor que fue la primera atracción de Estocolmo (1883). El ascensor, que sube a una altura de 38 metros, funcionó a vapor hasta 1915.

Lundagatan

Si no fuera por las novelas de Larsson, esta calle pasaría desapercibida. Discreta y sin apenas movimiento, es eminentemente residencial. Comienza en Zinkendamms y termina en la iglesia de Högalid, cuyas torres gemelas se ven desde distintos puntos de Söder. A lo largo de Lundagatan se suceden los edificios elegantes con otros de arquitectura menos destacable. En estos últimos es donde Larsson ubica la vivienda de Lisbeth al comienzo de la saga y a la que se muda su amiga Miriam Wu en la segunda novela.

Bellmansgatan

En el número 1 de Bellmansgatan, es donde el periodista Mikael Blomkvist vive en un ático de sesenta y cinco metros cuadrados justo al comienzo de la calle, con vistas a Riddarfjärden y Gamla Stan, Slussen y el Ayuntamiento. Además del domicilio de Blomkvist, en la misma calle abre sus puertas el pub The Bishop's Arms, citado en la tercera novela, aún inédita en España. Los amantes del arte podrán curiosear en las numerosas galerías que se encuentran en la confluencia de Bellmansgatan con Hornsgatan. También merece la pena pasear por el comienzo de las vecinas Tavatsgatan y Brännkyrkagatan, calles adoquinadas y con todo el encanto que da la imperfección de su antiguo trazado.

Hornsgatan

Larsson escribió numerosos pasajes de su trilogía en el Mellqvist Kaffebar (Hornsgatan, 78) y es aquí donde quedan Blomkvist y Lisbeth en una de las pocas ocasiones en las que salen juntos. Antes de ser uno de los cafés más fotografiados de Estocolmo, el Mellqvist ya era un local muy frecuentado por los intelectuales suecos. De 10 a 12 bulle de actividad.

Calle eminentemente comercial, a uno y otro lado se suceden los escaparates de galerías de arte, tiendas de electrodomésticos, locales de importación, zapaterías y peluquerías, pequeños restaurantes y clubs... Al comienzo de Hornsgatan se encuentra Mariatorget, una plaza muy transitada durante los fines de semana y lugar escogido por Greger Backman -marido de Erika Berger- y Mikael para tener una conversación al amanecer.

Vasastaden

Meticulosamente trazada y con aires modernos, esta zona al norte de la ciudad alberga el domicilio del abogado Nils Bjurmann en la calle Upplandsgatan (metro Odenplan) y la casa de Miriam Wu, amiga y amante de Lisbeth Salander, en Tomtebogatan (metro Sankt Eriksplan).

Slussen

Aquí se levantan edificios que, sin alcanzar la altura de los rascacielos, sobresalen entre la arquitectura clásica de las islas adyacentes. Y es en este punto donde Larsson sitúa en la ficción la sede de Milton Security, empresa de seguridad para la que trabaja Lisbeth Salander. Lo más significativo de Slussen es su intrincado sistema de circunvalación, en forma de trébol e inaugurado en 1935.



Saltsjöbaden

Atracadero en Saltsjöbaden.
Situada fuera de la capital, muchos la consideran parte del archipiélago, aunque permanece anclada al continente.La construcción de esta ciudad marítima comenzó en 1891 y su diseño se basó en las urbanizaciones que en aquel tiempo comenzaban a florecer en Estados Unidos. Hoy conserva parte de la arquitectura grandiosa del siglo XIX y exhibe residencias de algunos de los más prestigiosos arquitectos europeos contemporáneos. Es en esta exclusiva localidad donde Larsson sitúa el domicilio conyugal de Erika Berger.

PD: he visto que alguien de Suecia ha entrado en el blog. ¿Serà la Salander?

3 comentarios :

Anónimo dijo...

Interesante propuesta. Es un vicio confesable lo del amor a las maletas y ahora mismo las congería con ese destino, pero como no hay tiempo (del monetario)hay que elegir y......
Estamos pensando en octubre viaje 21 dias solo dos ciudades, la de llegada Manaus y la de partida Salvador de Bahía, ¿15 dias en barco y canoa por el AMAZONAS. Te apuntas?
Besos. Seronovesientas.

Txema Rico dijo...

No me lo puedo creer....tú a Suecia? Pero si ya pareces yo...vaya tela Pilareta quien te ha visto y quien te ve....y es que al final...tendré razón...eso sí, prepara coronas suecas a punta pala...barato no es....que lo disfrutes...me muero de envidia......aaagggggg!!!!!

la sargantana del puig campana dijo...

Lo de "estoy apunto de coger un avión para Estocolmo" es un frase hecha. Ojjalà.!!!

Pero a mi me tira más el Amazonas que Suecia. Ya lo sabeis todos.