Ayer dejaba aquí colgada la canción de Pedro Navaja que como decía en el post me da muy buen rollo. La pena es que me ha durado ese buen rollito un día, ya dice el dicho aquello de que siempre viene alguien y te lo jode.
Después de una crisis superada con inteligencia hace tan solo un par de meses, ahora estaba yo en pleno éxtasis de felicidad corriente y moliente: la cervecita del "por fin es viernes" , una buena novela, los aperitivos del domingo al sol, unos cines, la primera playa con mis sobrinos, los encuentros inesperados, las llamadas de las amigas: todas esas cositas buenas que te alegran la existencia sin llegar al paroxismo. Porque la FELICIDAD, ASÍ EN MAJUSCULAS a los mortales, a los de a pie nos quedó grande.
Bueno, estaba contado aquello de que vengan a joderte la existencia, seguro que os ha pasado muchas veces, y sabéis de que hablo. Sobretodo los que trabajáis cara al público, o tenéis superiores, jefes, o madres abadesas. Muchas veces es muy difícil el "toma y daca" en el trabajo, creo que todos somos conscientes de que nos podemos equivocar y de hecho lo hacemos ( no somos perfectos), pero en la gran mayoria de las ocasiones creo que el error está en que falla la educación, la comunicación, o simplemente hay que sacarse el muerto de encima. Son cosas que te hunden muchas veces en la miseria absoluta, y de repente estas en casa dándole vueltas a lo mismo mil veces, y hasta te planteas tu validez profesional después de 12 años en el tajo.
Menos mal que aparece una luz en las tinieblas que te dice: ¿ pero por qué cojones tiene que afectarme esto a mi?, mi vida me pertenece absolutamente y no pienso tardar ni un minuto más en esto. Por tanto escribo aquí el punto y final....y a otra cosa mariposa.
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