31 enero 2011

Somos una contraseña


¿ Os habéis dado cuenta que somos una absurda contraseña? A eso hemos llegado. Somos una combinación extraña de números o letras que se apodera poco a poco de nuestro yo anterior. Hemos cambiando el tradicional “dime con quien andas y te diré quien eres” por esto nuevo de “dime el PIN que has elegido y te diré como eres” o “dime tu contraseña y te adivino de que pie cojeas”.

Somos lo que hoy en día se llama un password en el mundo de los nativos digitales, o un nickname para los aviesos que navegan por chats y oscuros foros donde hay que esconderse detrás de lo que la ortodoxia patria conocía como alias.

Hoy la contraseña nos la piden hasta para comernos el plato de sopa boba. Para todo, contraseña para el recibo de la luz, contraseña para el banco, contraseña para comprar, para el paypàl, para la escuela oficial, para el facebook, para el youtube, para Iberdrola, para el móvil….

Dejamos de existir como personas para ser unas letras pegadas a una arroba y a continuación una palabra que nos hemos asociado a nuestro carácter, a nuestra persona; el nombre del gato, o el del primer amor, cada uno es fiel a lo que quiere o a lo que puede.

Lo más lógico es ponerte la misma clave de usuario, una para todo, así, fuera memorizar combinaciones irrisorias i anodinas que olvidas en volver a utilizar ese mismo servicio. Pero por alguna oscura razón no ponemos siempre la misma contraseña. ¿o esto sólo me pasa a mi?
Así que vamos coleccionando contraseñas como si guardáramos en un cajón pasaportes falsificados de chinos sin residencia. ¿Cuántas veces os habéis cabreado por no acertar con el santo y seña que te pide el maldito ordenador?

3 comentarios :

Anónimo dijo...

Quizas si pusieramos una sola contraseña para todo, seria más facil adivinar y entrar en nuestro mundo virtual, asi con muchas sera más dificil, no?
y además con esa amplia variedad de caracteres: numeros y letras aleatorios o no,podemos llegar a pensar que somos mucho más complicados de lo que realmente somos y hacernos los duros y los interesantes, aunque en realidad seamos la mar de superficiales y básicos.

Anónimo dijo...

yo me siento como una caja fuerte, un día custodio un brillante de cojones en mi interior, otro día me veo cargado de pasta en B, (SI EL DÍA ES NEGRO) otro con las joyas de la corona , otro de lleno de bisutería y normalmente el fin de semana sueno como si un collar de perlas se hubiese
desparramado,,,,por ahí dentro.

Una noche de resaca al tratar de despertar
note que por el ombligo me empezaba a desinflar
que mi cuerpo se arrugaba como un papel vegetal
e iba pasando, que curioso, al estado gaseoso.
y tras la metamorfosis me senti mucho mejor
era un aire gris oscuro y con bastante polucion
se notaba en cualquler caso que era aire de ciudad
que si bien no es el mas sano. lo prefiere el ser humano.
Aire, soñe por un momento que era aire
aire. oxigeno. nitrogeno y argón
sin forma definida ni color
fui aire volador.
como yo soy muy consciente hasta en esta situacion
decidi ser consecuente con mi nueva dimension
y probe a ser respirado por la que duerme a mi lado
sin entrar en pormenores yo se hacer cosas mejores.
como no me satisfizo la experiencia sexual
se me inflaron los vapores. me converti en huracan
di unas tres o cuatro vueltas y a la quinta me canse
este cuarto es muy pequeño para las cosas que sueño.
Aire. soñe por un momento que era aire
aire. oxigeno, nitrogeno y argón
sin forma definida ni color
fui aire volador.
Y lo siento por mi novia y el cristal que me cargue
me escape por la ventana y en picado me lance
pero tuve mala suerte y cuando iba a remontar
me volvi otra vez humano. no falteis al funeral.
Aire, soñe por un momento que era aire
aire. oxigeno, nitrogeno y argón
sin forma definida ni color
fui aire volador.

Sita dijo...

Sita, no eres la única, tengo el correo lleno de mails recordándome qué contraseña puse!!